El Triatlón de Heidelberg es uno de los momentos especiales del calendario anual: una prueba de larga tradición que tiene como telón de fondo histórico el casco antiguo de la ciudad, con un recorrido a nado que atraviesa el río Neckar. Lo que hace que esta carrera sea tan fascinante es la mezcla de desafío atlético, naturaleza y energía de los muchos atletas que se reúnen cada año en la línea de salida. Para muchos, es uno de los momentos culminantes del verano, y para RESTUBE, un asunto muy cercano a nuestros corazones.
Como Socio de Seguridad, apoyamos el triatlón equipando la prueba y a sus participantes con Boyas de Seguridad - disponibles para prestar, sencillas y sin complicaciones. El Neckar tiene sus propias reglas. Corriente, temperatura, viento, todas las impresiones: nadar en aguas abiertas exige concentración y respeto. Y aquí es exactamente donde una boya marca la diferencia decisiva: crea visibilidad, crea seguridad y permite una sensación de libertad en el agua, sin esa sensación de agobio que algunos experimentan, sobre todo al principio.
Una cosa de la que estamos especialmente satisfechos este año es que las Boyas de Seguridad están oficialmente homologadas. Se trata de una señal importante. El organizador lo expresa de esta manera "Como desde hace años sólo nadamos en aguas abiertas con una Boya de Seguridad en privado, estamos muy contentos de que ahora también se permitan en la competición. Queremos reducir el miedo al curso del Neckar, especialmente para los principiantes, y hacer que la natación sea lo más segura y relajada posible para todos". Este sentimiento nos sale del corazón. La seguridad no es una limitación, sino una invitación, y si anima a la gente a enfrentarse a una experiencia de la que de otro modo podría haber dudado, entonces es un verdadero valor añadido.
Cualquiera que haya estado alguna vez en la plaza Neckarmünzplatz poco antes de la salida conoce esa sensación de hormigueo. Los barcos, los espectadores en la orilla, el viejo puente elevándose por encima de todo. Una respiración profunda, tal vez una breve mirada a la boya, flotando ligeramente en el agua, lista para cuando la necesites. Y luego la señal de salida. Te deslizas en el río, dejas que la ciudad se deslice, tus brazos encuentran su ritmo, y en algún momento sólo queda una sensación: Estoy nadando. Estoy a salvo. Puedo disfrutar de este momento.
Este es exactamente el sentimiento que queremos reforzar. Un triatlón es rendimiento físico, pero también mental. Quien puede centrarse en lo esencial, quien sabe que en caso de emergencia basta un simple movimiento de la mano para conseguir flotabilidad, nada más relajado. Y quien nada relajado suele nadar mejor.
El Triatlón de Heidelberg ofrece el escenario perfecto para ello. Es exigente, paisajísticamente impresionante y está formado por una comunidad fuerte. La decisión de permitir Boyas de Seguridad demuestra valentía y responsabilidad. Demuestra que el rendimiento y la seguridad no son contradictorios, sino que pueden reforzarse mutuamente.
Estamos orgullosos de formar parte de este evento. Nos alegramos por cada participante que nada por el Neckar con RESTUBE a la espalda. Y esperamos seguir colaborando con el equipo de triatlón y con toda la comunidad para hacer de las aguas abiertas un lugar en el que uno pueda sentirse libre, y seguro al mismo tiempo.
